Es cierto que todas caemos rendidas ante los zapatos de Louboutin o las sandalias de Jimmy Choo pues con ellos nos sentimos unas reinas. Pero también es posible analizar esa otra cara del calzado, cuando los zapatos se transforman en objetos fetiche.
No es menos atractiva por cierto, destila magia y pasión a fuerza de diseños que atrapan la mirada, en muchas ocasiones debido a su originalidad.
Desde siempre el calzado ha sido considera un producto que va más allá de sus virtudes prácticas. Los zapatos revelan la personalidad, son objetos de culto y placer. También el objeto perfecto para que algunos diseñadores desplieguen su ingenio y nos regalen creaciones únicas e irreverentes.
Eso ha sucedido con los hermanos Dean y Dan Caten que cobijados en la marca Dsquared2 se han atrevido a diseñar estos botines de cuero negro con largos cordones y tacón de aguja que ¡sorpresa! además funcionan a modo de patines de hielo.
Y no son un producto diseñado para un museo sino que los puedes comprar por un precio de 1.285 euros. Si vives en una cuidad en la que nieva en invierno ya sabes, te pones estas botas abres la puerta de tu casa y sales a patinar con mucho glamour.